En un contexto donde la sostenibilidad y el desarrollo bajo en carbono son más cruciales que nunca, China se posiciona como un líder en la investigación y desarrollo de energías limpias.
El grupo chino Huaneng, reconocido como el centro de investigación más grande del país, ha establecido metas ambiciosas para alcanzar niveles sobresalientes de desarrollo sostenible, especialmente a través de la energía eólica y solar. Este esfuerzo no solo beneficia a China, sino que también busca fomentar un crecimiento conjunto con los países del Sur Global.
Un centro de innovación energética
El director de investigación del instituto destaca la visión estratégica del centro, que se enfoca en el uso seguro y eficiente de las energías limpias. Con una meta clara de convertirse en uno de los principales centros de investigación en este ámbito.
Huaneng cuenta con un talento joven, cuyas edades oscilan entre los 25 y 30 años, compuesto por profesionales altamente capacitados y doctores. Además, la colaboración con expertos internacionales en 17 especialidades distintas fortalece aún más su capacidad investigativa.
El instituto opera con tres filiales y 14 plataformas de investigación a nivel estatal y provincial, así como 17 laboratorios especializados. Con más de 90 premios científicos y una medalla de oro por patentes en China, ha logrado acumular 2900 patentes autorizadas. Entre sus innovaciones destacan tres tecnologías clave para reducir el consumo y la emisión de carbono, apoyadas por un sistema tecnológico basado en big data.
Logros Recientes y Proyecciones Futuras
En los últimos años, el instituto ha firmado contratos por un valor total de 4200 millones de yuanes, generando ingresos que alcanzan los 2600 millones. Estos esfuerzos han dado lugar a proyectos nacionales significativos en diversas áreas, como la generación de electricidad mediante energía eólica y la fabricación de baterías de litio.
En el ámbito eólico, se han conseguido instalar capacidades que suman 18 millones de megavatios, además, se han desarrollado componentes esenciales para la conversión energética y un sistema avanzado de almacenamiento energético operando a 35 Kv, un hito notable es su sistema de captura de CO2 que logra reducir hasta 120 mil toneladas anuales sin liberar contaminantes, convirtiéndose en un ejemplo pionero a nivel mundial.
La transferencia tecnológica es otro pilar del instituto, con cinco tecnologías transferidas y tres proyectos destacados relacionados con equipos para la generación de nueva energía. También se está promoviendo el desarrollo industrial en sistemas de almacenamiento energético mediante baterías de calcio y litio.
De cara al futuro, el instituto tiene planes ambiciosos que incluyen investigaciones satelitales y un sistema inteligente para suministro térmico, lo que reafirma su compromiso con un desarrollo sostenible e inclusivo.
Con estas iniciativas, China no solo reafirma su papel como pionero en tecnología verde sino que también invita al Sur Global a participar en esta transformación hacia un futuro compartido. La colaboración internacional será clave para maximizar el potencial sostenible que estas energías que ofrecen.
